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CB?+1
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Interesante el capi
El destino es incierto
Contesta el celu, no sabe quien le habla y le dice eso,
Que bien!!!!
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Bubble ball+2 .
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La historia se pone cada vez mas interesante, "Quien desprecia...ama!"Benjamin se enamoro de ella la primera vez que encontro su mirada y por celos ,viendo que se fijaba en Manuel, la insulto ponendola en ridiculo con los otros....por cobarde se porto como un mochoso....ahora a ver como se rescata...gracias , feliz findes y besos . -
Danü+2 .
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Holaaa Chicas!!!! Como Andan??? Les dejo otro cap, el finde se me hizo imposible publicar.... Muchisimas gracias a todas por sus comentarios y Bubble ball tenes toda la razon "Quien desprecia...ama!".... Besotess Nos vemos!!!
Capitulo 5
¿Qué diablos esta pasando?
Terminé de ponerme el maquillaje, tapándome tenuemente las pecas que aunque poco notorias, persistían en mi nariz y la línea debajo de mis ojos, en realidad en alguna ocasión alguien mencionó que eran coquetas, pero ahora mismo tenía que alejar cualquier pensamiento que me llevara a Benjamin Rojas.
Moví mi cabeza y agarré mi cabello con un lindo broche de piedritas de colores, miré mi blusa de gasa y mis pantalones sueltos, sonreí ante el espejo después de ponerme brillo labial, cenaría con Lujan y con Marco, para acallar a mi amiga que repetía una y otra vez que el viernes por la noche era un delito quedarse en casa.
Acepté pues si no lo hacia ella empezaría a indagar que me pasaba y sinceramente ni siquiera yo lo sabía, aun cuando esta semana se había terminado las incontables flores, Manuel seguía hablando conmigo mediante correos o una que otra sesión de chat, en realidad era simpático y muy divertido pero tenia el ligero presentimiento que aun no se daba por vencido, aun tenia bajo la manga lo de mi supuesto novio, pero deseaba que mi vida volviera a la normalidad, la preparatoria estaba en el pasado no en mi presente.
Después de un viaje corto en mi auto hasta nuestro restaurante favorito de comida Italiana y de anunciarme, saludé a mis amigos que ya se encontraban en la mesa.
-Hola Cam- saludó Marcos sonriente, al verlos eran como leche con canela, una mezcla extraña pero única, Lujan rubia, y sofisticada mientras él, de tez olivácea, cabello castaño y aire desenfadado.
-Hola chicos, ¿ordenaron ya?- pregunté mientras Lujan negaba.
-No, te esperábamos- contestó mientras miraba el menú.
-¿Creí por un momento que nos cambiarias por otra “cita de ensueño”?- se burló mi amiga mientras yo entrecerraba los ojos.
-Te dije que le había dicho que no pues iba a salir con mi eterno amado- dije mientras Marcos reía y me tomaba la mano a modo teatral.
-Gracias cariño- contestó divertido, Lujan jamás le ocultaba nada y él le respondía igual, a veces aparecía en mi el gusanito de la envidia…
¿Que se sentiría amar así?
-Además no era una cita, él lo llamo “cena de amigos”- continúe mientras Lujan rodeaba los ojos, el mesero llegó para tomar nuestra orden y se fue mientras ella replicaba.
-Lo que entrelineas dice: “Te conquistaré a toda costa”, sabes Manuel esta pagando con sangre el haberte rechazado- terminó mientras yo reía.
-Y he llegado al punto de alegrarme, ahora pienso que tal vez solo era un capricho de mi parte, lo único que quiero es olvidarme de todas las personas que haya conocido cuando aun usaba frenos- continúe mientras ellos reían.
-Se positiva Cam, hubiera sido peor si el acosador fuera Benjamin Rojas o algo así- bromeó Lujan mientras sentía que la sangre caía junta a mis pies, después de la llamada no había sabido nada de él, pues en realidad no había nada que saber, aun así me sentía extraña, él sabia muchas cosas de mi, ahora después de tanto años y yo desconocía todo de él, solo era un recuerdo que llegó una noche y me dejó con el corazón agitado.
-Dios no me digas que aun no olvidas todo el martirio- se burló Lujan.
-Claro que si, esta totalmente superado- dije tratando de sonar contundente.
-Me intriga saber que debiste haber hecho para que ese tonto te odiara tanto- murmuró Marcos mientras el mesero llegaba con nuestros platillos, me tomó completamente desprevenida.
-¿Yo?- pregunté mientras miraba a Lujan, mi amiga miró a su novio curiosa.
-No yo no le hice nada, nunca- negué mientras lo miraba, él levantó las manos.
-Tranquila Cam, solo digo que debe haber un motivo para que fueras su único objetivo- explicó mientras yo rodeaba los ojos.
-Era un adolescente idiota es todo- murmuré mientras me llevaba el tenedor a la boca.
-Por lo mismo, cuando somos jóvenes vemos mas la vida negro o blanco, él tenia un motivo, no lo dudes- concluyó mientras yo miraba a Lujan, ahora resultaba que yo era la culpable de todo.
¿En que mundo es justo eso?
-Tienes que admitir que tiene sentido- dijo Lujan ante mi pregunta silenciosa.
-No hice nada- conteste alterada
-Gracias por tu apoyo amiga- terminé entre dientes, a lo que Lujan se rió divertida.
-Camila, eso ya no importa- me calmó mientras yo cerraba los ojos, tenia razón y sin embargo no dejaba de pensar en que Benjamin pudiera tener un motivo para hacer de la preparatoria mi infierno personal por mas estupida que fuera la razón, no, no debía mentirme, el era arrogante, insensible y creía que todo el mundo estaba a sus pies.
-Bien suficiente de mí y de mis “horribles tormentos”- murmuré con cara de fastidio mientras mis dos amigos reían.
Después de terminar de cenar, Lujan propuso ir a bailar, pero no tenia ánimos, solo quería llegar a mi casa y recostarme en mi cama, había sido un día ajetreado y no me apetecía andar de ligue.
-Aun te pueden aceptar en el convento- murmuró Lujan mientras me subía al auto.
-No creo, te aseguro que no- contesté sonriente, Marcos miró a su novia divertido y se despidió con un gesto de mano.
Puse algo de música de camino a casa, después de dos altos, mi cabeza estaba concentrada en recordar lo que pudiera haber molestado a Benjamin, era ilógico y lo sabía pero no podía evitar pensarlo, entre mas recordaba mas me daba cuenta que era al revés, él era el que se había ganado a pulso el odio que sentía, porque hasta ahora me daba cuenta que no lo tenia superado, yo odiaba a Benjamin Rojas, mas que a nadie.
Aparqué al lado de mi edificio y salí del auto rumbo a la entrada principal de este para dirigirme a mi apartamento, no me di cuenta que un auto esperaba en la acera hasta que fue demasiado tarde, recargado sobre un volvo, que vuelvo a repetir ¿Cómo diablos no vi?, estaba Benjamin Rojas, levantó la vista pero no sonrió, no dijo nada, solo me miró, di un paso, pensé en entrar casi corriendo y después me di cuenta que no tenia nada de que esconderme, nada.
-¿Qué haces aquí Benjamin?- pregunté en tono aburrido, no quería darle importancia.
-Hola para ti también Cam- contestó mostrando una tenue sonrisa.
-Lo siento no quería ser descortés, pero me extraña que estés aquí- admití mientras él se llevaba las manos a sus bolsillos del pantalón negro que llevaba, combinando perfectamente con un suéter gris de manga larga que se ajustaba a su cuerpo… ¡Camila!
-Yo…- pareció no saber que decir, quedarse en blanco, muy extraño.
-Me preguntaba si podrías devolverme mi saco- terminó ya con el mismo tono de voz, mientras me miraba, me sentí nerviosa, como si él estuviera describiendo como yo hace un momento la ropa que vestía.
-Cierto, el traje fino- murmuré mientras el asentía.
-No quería molestarte, es solo que vine y no estabas- murmuró, algo en sus ojos me dijo que sabía algo mas, recordé lo que le había mentido a Manuel, si eran amigos, su amigo debió de contarle, aunque me preguntaba si Manuel sabría del extraño comportamiento de Benjamin.
-Salí con mi novio- murmuré buscando en mi pequeño bolso las llaves.
-Espera aquí, ahora lo traigo- respiré tratando de calmarme y volver a sentir mis piernas.
-Hace frío- murmuró mientras yo lo miraba, sonreí tenuemente, ni en sueños entraría a mi casa, era mi lugar personal, mío.
-Solo será un momento- respondí mientras él me miraba algo divertido.
-No me invitas a pasar- murmuró en tono sensual… ¡No!
-Me enseñaron a no invitar a extraños a mi departamento- contesté algo mordaz, la verdad estaba llegando al límite de mi paciencia y mi cuerpo no respondía.
-Yo no soy un extraño- contestó serio
-Claro que si, solo eres alguien que conocía hace 10 años- repliqué mientras él reía.
-Aunque si cenas con extraños- inquirió mirándome, me tomó unos segundos comprender su pregunta.
-No es de tu importancia- murmuré.
-¿Que hay de diferente?- preguntó aun con la voz más oscura, más sensual.
- Manuel solo me ignoró, tú me arruinaste cada día de preparatoria- solté al fin el reclamó de tantos años.
Dio un paso hacia mí y luego se detuvo, cerró los ojos y luego, prueba de su trastorno bipolar, se rió.
-Claro además de que el haber tenido la oportunidad de salir con el gran Manuel lo cambia todo- murmuró molesto.
-Sabes Benjamin esta conversación no tiene sentido, en menos de 5 minutos tendrás tu saco- contesté girándome pero él tomó mi hombro y me giró, de pronto su cara estaba cerca, muy cerca, su respiración me erizaba la piel.
-Te pedí perdón- contestó entre dientes.
-Una simple palabra- repliqué mientras él me miraba, traté de dar un paso hacia atrás pero sus manos envolvieron mi cintura, miedo, calor, electricidad, todo mi cuerpo se sintió al rojo vivo.
-Suéltame- exigí contra su rostro, pero mi voz era un hilo fino.
-No se como- contestó antes de acortar cualquier distancia, puse mis manos en sus hombros tratando de alejarlo, pero cuando su boca se movía contra la mía, jadeé ante la sensación, deslizó sus lengua dentro de mi boca mientras la mía le daba la bienvenida, mi cuerpo respondía, mientras mi mente se rendía, aplastada.
Me apretó mas a su cuerpo y su cadera rozó la mía, su erección rozó mi entrepierna mientras gemía, él se separó un poco solo para caminar dos pasos hacia atrás girarnos y recargarme sobre su auto.
Detente, esa palabra se repetía pero era cada vez más y más lejana.
Nuestras lenguas danzaron juntas, sincronía perfecta de movimientos y sensaciones, una de sus manos viajó a mi cabello y quito el broche, mi cabello cubrió mi cuello mientras su otra mano acariciaba mi blusa, deslizó sus caricias por mi espalda y ahueco mi trasero, restregándome contra él, mojándome, haciendo que los dos jadeáramos mirándonos por fin a los ojos, de pronto al ver sus ojos todo volvió en un instante y por primera vez me odié con la misma intensidad que lo odiaba a él.
Benjamin me soltó como si le quemara, casi quiso correr, dio un paso hacia atrás mientras yo apretaba los puños.
-No quiero volver a saber nada de ti, nada- pedí entre dientes mientras entraba al edificio, una parte de mi se imaginó que diría algo, que haría algo pero cuando por fin llegué a mi departamento el coche ya se había ido, estaba temblando cuando entré a mi habitación, fui al cuarto de baño y me mojé la cara, pasé la mano por mi cuello, topándome con mi cabello, recordé el broche…
Me miré de nuevo e hice lo que desde hace tiempo no hacía, irónicamente desde que estaba en preparatoria, lloré.
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Benjamin
El claxon del auto que acababa de rebasar retumbo en mis oídos pero no le hice caso, no iba demasiado rápido, no iba lo suficientemente rápido para alejarme de todo, de mi infierno personal.
Pisé el acelerador mientras maldecía el haber siquiera pensado en ir a su departamento, pero ella no había dejado mi mente, llevaba dos semanas atormentándome, pareciera una venganza justa ante lo que yo le había hecho…
Hace 10 años yo no sabía si lo que estaba haciendo estaba bien, pero no importaba, había encontrado una forma de ser único para ella, de que ella me recordara, a mi, no importaba lo idiotizada que estuviera por Manuel, yo también estaba presente.
Después de años pensé que cuando la viera de nuevo, si llegaba a hacerlo algún día, le pediría perdón pero jamás me imagine lo que haría, la besé y ella tenía razón, una palabra no bastaba, no bastaba.
Ya no importaba, era la ultima estupidez que hacia por Camila Bordonaba, aun cuando el tiempo pasa, la gente no cambia y ella seguía siendo la misma niñita enamorada de mi mejor amigo, aun cuando fuera una mujer hermosa y tuviera novio.
¿Qué hacia saliendo con él?
Y yo, aun era el mismo loco… por ella, el mismo que nunca supo como ponerse delante de Manuel Aguirre.
Edited by Danü - 23/9/2014, 17:36. -
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lo sabía, sabía q él había estado pillado por ella y ahora lo está más!! menos mal q se quería alejar de benja , ante tremendo beso haber quién la cree ahora jajajaja parece q ninguno se ha olvidado del otro!! siguela bss!! 
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iirene(L)cesc .
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Capitulazo! Yo también me imaginaba que estaria enamorado de ella en la preparatoria. Que lastimita me da Benja ahora, aunque se tiene merecido el desprecio después de hacerla padecer tanto.
Espero capitulo pronto:). -
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Sabia q el estaba enamorado de ella . -
yisette .
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osea que el la molesto todo ese tiempo porque estaba muerto con ella... . -
mariavi7 .
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madre miaaaaa benjamin está loquísimo!!!! primer paso completado admitir que siempre ha estado enamorado de Camila, ahora a ver como se suceden los acontecimientos, que ganas de seguir leyendo!!! . -
Bubble ball .
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Pasaron 10 años pero sigue teniendo la misma mentalidad de niñito, tan difícil admitir con sencillez lo que se siente? Complicò su vida, hice vivir un infierno a la pobre de Camila e todo por esconder su enamoramiento, gran cobarde y aun tiene la presunción de echarle la culpa a ella....De verdad los hombres son de otro mundo! Gracias siguela pronto, besos . -
Danü+2 .
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Holaaa Chicas!!!!! Gracias por sus comentarios!!!! Les dejo otro capitulo.... Nos vemos Besotesss....
Capítulo 6
Odio a las moiras y su destino
Alisé mi vestido rosa, con holanes en las mangas y en la falda, en realidad no había querido asistir al baile, pero Martin me había dado el vestido, no quería hacerlo sentir mal, le había dicho que mi pareja me esperaría en el baile… tremenda mentira, ahora solo esperaba pasar desapercibida, me tomé un vaso de refresco en un rincón del gimnasio de la escuela y miré como el rey y la reina de la graduación bailaban, Manuel y Sabrina se miraban tan bien juntos, ambos guapos, ambos con cuerpos atléticos, ya no éramos unos niños, bueno al menos ellos ya no, yo seguía con cuerpo de niña y aún cuando me había quitado la ortodoncia, los lentes aun seguían, el cabello erizado que llevaba en un moño improvisado y las pecas, por supuesto.
Me había puesto brillo labial por primera vez, en realidad no estaba fea, solo simple, un punto que se puede borrar en un mapa.
-Te imaginas tener una historia de amor como la de ellos- suspiró Luna mientras yo sonreía, negué con la cabeza y me disculpé saliendo del gimnasio, caminé dando la vuelta mientras oía unas voces a lo lejos.
-Pensé que iríamos todos juntos a la Universidad- replicó Sol molesta.
-¿De verdad salimos aquí para hablar?- contestó Benjamin con voz cansada.
-Esto es en serio Ben, creí que estaríamos juntos- chilló ella con voz infantil.
-No, no juntos y lo sabes Sol- contestó el con voz dura.
-¡Entonces es un juego!- contestó ella enojada.
-Eres mi amiga- repitió el.
-Bueno, entonces por que te alejas de tus amigos- inició ella, escuché con el ceño fruncido…
-No me alejó, seguiré en contacto, con todos- terminó Benjamin mientras yo caminaba un poco mas.
-Pero en la Universidad del Este estaríamos a un paso de distancia, tienes una beca deportiva igual que Manuel- insistió ella.
-El deporte no es lo mío- contestó él, me escondí en la esquina mientras los miraba, ¿Dónde estudiaría Benjamin ?
-Pero eres buen corredor- insistió ella,
-No es lo que quiero hacer de mi vida- terminó el mirando al suelo.
-Sabes, parece que no eres tú- murmuró ella molesta.
-Tal vez ya me canse, ¿no crees?- contestó el y Sol rió.
-¿De que Benjamin ?, lo tenemos todo- contestó ella con aires de suficiencia, niñita tonta.
-No, ese es el problema, no tenemos nada que en realidad valga, la popularidad no te dará nada, ¿no lo entiendes?, no quiero seguir así- él miraba hacia los árboles de la parte trasera de la escuela mientras ella bufaba.
-Suenas a funeral- replicó ella
-Entonces vete- gruñó el, ella se giró mientras yo sentía como una hormiga me picaba en la pierna, la espanté moviendo algunos arbustos, salí a su campo de visión y Sol pasó delante de mi aventándome y perdiéndose de mi vista.
-Es de mala educación escuchar conversaciones ajenas pecas- regañó él sin mirarme, apreté las manos en puños y me giré para irme, eso se merecía Benjamin Rojas quedarse completamente solo.
Me removí en la cama y abrí los ojos, esperando estar en la preparatoria, entrando al gimnasio de nuevo, miré mi habitación y al reloj que marcaba las cuatro de la mañana, suspiré y cerré los ojos, hace años que no soñaba con un recuerdo de esa época.
Al final nunca supe donde estudio Benjamin Rojas, Manuel se graduó de la Universidad del Este, lo sabia por las conversaciones de esta ultimas semanas pero de Benjamin… nada, cerré los ojos y traté de olvidarlo, no tenia importancia, aun así de una forma o de otra él no salía de mi mente, no podía olvidarlo, por mas que luchara, por mas que lo intentara, me levanté y fui al cuarto de baño, me lavé la cara y regresé a mi cama, sin pensarlo saqué mi móvil y llamé a Lujan, contestó al tercer timbrazo con voz dormida.
-Dime que es importante y no te matare- saludó mientras yo sonreía.
-Lo siento tuve una pesadilla- contesté mientas me acurrucaba en la cama.
-Tranquila mi niña los monstruos no existen- se burló ella mientras yo reía.
-Este si- murmuré mientras oía a Lujan moverse.
-¿Qué pasa Cam?- preguntó ella y yo comencé a llorar.
-Puedes venir- ella aceptó y colgó, escondí mi rostro en la almohada y esperé, no sabía que mas hacer, no lo entendía, hacia ya casi dos semanas que había encontrado a Benjamin fuera de mi apartamento, había desaparecido como llegó, sin embargo no podía arrancármelo de la cabeza, lo odiaba y me odiaba a mi, por que jamás había sentido por alguien lo que mi cuerpo sentía con el solo recuerdo de sus labios, unos labios que no entendía por que habían tocado los míos.
Oí a Lujan abrir con la llave que tenía de mi casa y se acostó a mi lado mientras yo me limpiaba algo la cara.
-¿Qué pasa Cam?- preguntó ella con voz distorsionada.
-No se que me pasa, no puedo, no…- escondí la cara en la almohada y ella apartó mi cabello, me dejo desahogar y se sentó en la cama con la espalda recargada en la cabecera, al poco rato yo me acomodé en la misma posición y ella esperó.
-Soñé con Benjamin- conté al fin mientras ella fruncía el ceño.
-Camila es parte de tu pasado, solo era alguien que te molestó, solo alguien sin importancia- yo negué mientras ella trataba de tranquilizarme.
-Es que no es pasado, esta aquí, aquí, no se va, él… me beso- continúe mientras me señalaba la cabeza para luego esconder la cara entre mis manos.
-¿Cuándo?- la voz de Lujan parecía de sorpresa.
-La noche del baile y hace dos semanas, estaba aquí- le conté todo desde el desperfecto del coche hasta el punto en el que me di cuenta que se había quedado con mi broche.
-Camila - me abrazó y acarició mi cabello.
-No seque decirte, tienes que olvidar todo lo que pasó, lo viejo y lo nuevo, él tiene su vida, tú la tuya, tal vez solo se les salió de las manos, tantos sentimientos encontrados- murmuró mientras yo la miraba.
Estuvimos un rato así, al final desayunamos juntas y se fue para alistarse rumbo a su trabajo, cuando estuve cambiada y peinada, fui al closet y saqué la bolsa con el saco, no quería nada de él, debía olvidar, comenzar de nuevo y cerrar esa etapa.
Marqué el número y esperé
-Hola- contestó Luisana Rojas en tono cordial
-Hola Luisana, soy Camila, me recuerdas?- saludé mientra se oía un pequeño alboroto, como si se le hubiera caído algo.
-Claro que te recuerdo Camila, ¿En que puedo ayudarte?- preguntó ella
-Me gustaría comer contigo y pedirte un favor si no te molesta- pedí mirando la bolsa.
-Me encantaría, pon la hora y el lugar- contestó casi con una sonrisa a través del teléfono, nos quedamos de ver en un pequeño restaurante chino cerca del centro, fue a realizar unos pendientes a la oficina y a las 2:30 estaba frente a la menor de los Rojas, quien me miraba expectante.
-Estoy feliz de que me llamaras, tenia ganas de volver a verte- comentó ella mientras yo sonreía.
-Gracias Luisana- ordenamos y esperé un poco antes de pedirle mi pequeño favor.
-Tu esposo me odiara por robarte a la hora de comer- bromeé mientras ella reía.
-Michael se la pasa en el estudio, es compositor, y profesor de música, siempre leyendo, siempre estudiando o creando- murmuró ella tratando de sonar fastidiada pero sonreí al mirarla, parecía muy, muy enamorada, me recordó a Lujan hablando sobre Marcos.
-Se mira muy inteligente- me sonrojé casi de manera involuntaria y ella rió.
-Lo se, cuando lo conocí lo odiaba, necesitaba un tutor para literatura, soy realmente mala, así que me asignaron bajo su tutela, yo creía que era un estirado y el creía que era un niña hueca- sonrió y yo reí.
-Al parecer ambos estaban equivocados- ella asintió y luego se puso seria.
-No del todo, parte si, parte no, nadie debe juzgar antes de tiempo y todos tenemos defectos, comentemos errores, pero siempre ahí alguien que te hace ser mejor, que te hace cambiar- contestó mientras me miraba, sonreí y ella suspiró.
-Camila yo, mira sobre todo lo de la preparatoria…- le toqué la mano y sonreí ya no valía la pena, pedí la cuenta y me giré hacia ella.
-Ya esta olvidado Luisana- ella sonrió
Cuando estuvo pagado, me giré y cogí la bolsa, se la entregué y tomé mi bolso.
-Sabrás a quien dársela, espero verte de nuevo Luisana, gracias- me despedí, ella frunció el ceño pero no dijo nada, me besó la mejilla y salí del lugar sin mirar atrás, por fin mi pasado quedaba cerrado.
Me dediqué a ocupar mi cabeza, a seguir con la vida que yo quería, me concentré en remodelar el estudio de mi apartamento y en el proyecto de la revista digital, para ello organizamos un concurso de licitaciones con los mejores despachos de analistas y programadores en el estado, al final después de casi dos semanas, teníamos el proyecto ganador, y todo estaba preparado para comenzar a trabajar, el proyecto estaba estipulado para salir a la luz en a lo mucho un mes, en el cual trabajaríamos codo a codo con el personal de “ProgFly”, para poner todo en marcha y capacitar al nuevo departamento que se encargaría de la revista por Internet.
-Están pendientes de firmar estos papales Camila- comentó Jane sosteniendo unos folder.
-Claro, gracias- contesté mientras ella sonreía.
-Si no me necesitas mas me retiro, solo recordarte que mañana viene el gerente de la empresa de programación que se contrató, para firmar el contrato.
-Esta bien Jane, descansa- mi secretaria asintió y se fue, me quedé un rato mas, mientras la soledad de la oficina me llenaba de un sentimiento profundo, en realidad no había nada mas, solo eso, silencio, vacío, por primera vez sentía que me hacia falta algo.
Al siguiente día, me desperté con los ojos hinchados, no había podido dormir bien, me duché dejando que el agua me relajara un poco, me puse gotas para los ojos y pasé de lo lentes de contacto, saqué unos lentes delgados sin armazón y dejé mi cabello lacio en una coleta alta, me maquillé tenuemente y me puse un lindo traje sastre negro con falda en tubo que acentuaba mi figura, me coloqué los zapatos y salí rumbo a la oficina, un sentimiento de inquietud me acompañó toda la mañana, salí a almorzar con Lujan la cual insistía en que debíamos de salir este fin de semana, mi amiga aun seguía insistiendo en que necesitaba enamorarme de alguien, para olvidarme de todo aquel embrolló que mi cabeza se había formado pero me aterraba, enamorarse era entregarse a alguien y como ibas a saber si esa persona no te haría daño, no te lastimaría.
La extensión de Jane sonó y contesté mientras revisaba algunas propuestas de portada.
-Camila el gerente de ProgFlyesta aquí- informó ella mientras yo asentía.
-Claro puedes ofrecerle un café y llevarlo a la sala de juntas- ella aceptó y colgó, cuando salí de mi oficina con el contrato en la mano, Jane regresaba y me dio las copias que faltaban.
-¿El Sr. Sanders viene solo?- pregunté a Jane mientras ella negaba.
-Bueno si viene solo pero no es el Sr. Sanders, ayer por la tarde llamaron, ProgFly es dirigida por dos socios el Sr. Sanders esta de viaje así que en su lugar esta aquí el Sr. Rojas- contestó ella mientras yo tiraba la carpeta al suelo, me disculpé y la junté sintiéndome de papel, cerré los ojos y traté de concentrarme, simple coincidencia.
-No importa Jane, ¿Cuál es su nombre?- pregunté mientras ella miraba en su agenda.
-Benjamin Rojas.
Esta debía ser otra pesadilla.
Tenía que serlo.
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Benjamin
Miré la sala de juntas tratando de convencerme que aun estaba a tiempo de irme sin verla, me había prometido a mi mismo que la olvidaría, olvidaría mi triste obsesión de adolescente y seguiría con mi vida, pero cuando Jorge me informó sobre el nuevo proyecto de la revista digital y cuando me enteré quien nos estaba contratando no puedo resistirme de involúcrame en el proyecto hasta que ganamos la licitación, pensé que podría hacer mi trabajo sin cruzarme con ella, al fin y al cabo Jorge podría realizar todo el trabajo aquí, pero tuvimos un problema con la filial de España y tuvo que salir de viaje, estuve tentado a cancelar la cita y pedir que esperaran a que Jorge regresara pero me di cuenta que no debía huir de nada, ni siquiera de la mujer que me volvía completamente loco, a la que odiaba y deseaba con todas mi fuerzas, llevaba un mes solo recordando sus labios, y el sonido de su voz, llevé mi mano al puente de la nariz, y escuché la puerta abrirse, ahí estaba ella.
Me levante alisándome la corbata gris y el saco negro, no pude evitar mirarla desde esos lentes que la hacían parecer tan ella hasta su indumentaria de alta ejecutiva y en ese momento tomé un decisión, me disculparía por todo lo que hice cuando estuvimos en el instituto, con acciones no palabras como ella había pedido, ya no era el estupido adolescente que solo podía molestar, ahora tenía lo que quería, mi trabajo y mi familia, después cerrado ese ciclo, ella podría seguir su vida y yo la mía.
-Hola Benjamin, parece que trabajaremos juntos- me tendió la mano y la estreché mientras me hormigueaba la piel, nos separamos y se sentó poniendo de distancia la mesa.
-Te parece si revisamos el contrato- me tendió los documentos y yo asentí, ella parecía imperturbable, "¡Eres masoquista Benjamin Rojas!". -
yisette .
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Me encanto.... . -
iirene(L)cesc .
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Deseando leer el proximo capitulo! . -
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So cool, ahota les va a tocar estar mucho tiempo juntos 
tal vez así puedan ser amigos.
Siguela pronto
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lolocer .
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Genial! Espero con ganas el siguiente! . -
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Genial!!! al parecer si que es masoquista jajajaja quiere pedir perdón con actos??!! me muero por saber que hará jajaja siguela bss!!! .
Esta Vez, SiCapítulo 1 |
